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Cuida y repara tu piel después de la exposición solar, en cualquier momento y en cualquier lugar. Porque la protección es importante, pero la reparación es vital.
¡Hazte con el mist del verano antes de poner rumbo a tu próximo destino! El sol es tu fiel compañero la mayor parte del día. Por eso, no solo basta con proteger tu piel, ¡también hay que repararla!
Paso 1. Aplica tu fotoprotector sobre todo el cuerpo, incluidas orejas, manos y zonas del rostro de difícil acceso. Vuelve a aplicarlo cada 2 horas.
Paso 2. Cuando finalices tu exposición solar, pulveriza tu rostro con #REPASKIN MIST para regular los niveles de hidratación, refrescar la piel y reducir el daño solar acumulado hasta en un 50%.
Aplicar tantas veces como sea necesario, por el día o por la noche.
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Cuida y repara tu piel después de la exposición solar, en cualquier momento y en cualquier lugar. Porque la protección es importante, pero la reparación es vital.
¡Hazte con el mist del verano antes de poner rumbo a tu próximo destino! El sol es tu fiel compañero la mayor parte del día. Por eso, no solo basta con proteger tu piel, ¡también hay que repararla!
Paso 1. Aplica tu fotoprotector sobre todo el cuerpo, incluidas orejas, manos y zonas del rostro de difícil acceso. Vuelve a aplicarlo cada 2 horas.
Paso 2. Cuando finalices tu exposición solar, pulveriza tu rostro con #REPASKIN MIST para regular los niveles de hidratación, refrescar la piel y reducir el daño solar acumulado hasta en un 50%.
Aplicar tantas veces como sea necesario, por el día o por la noche.
