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Ayuda al sistema inmune de los niños.
Los niños son más susceptibles durante los meses de otoño e invierno porque el aire frío y la calefacción de los ambientes cerrados secan sus membranas nasales, lo que facilita la entrada de microorganismos como virus y bacterias. Además, cuando hace frío pasan más horas en el interior de los edificios, donde los microorganismos se pueden propagar con más facilidad de una persona a otra.
Niños de 3 a 5 años tomar 5 ml (una cucharada de postre) dos veces al día, preferentemente una por la mañana y otra por la noche; niños mayores de 5 años tomar 10 ml (una cucharada sopera) dos veces al día, preferentemente una por la mañana y otra por la noche. Una vez abierto, conservar en el frigorífico.