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Infusión de espino blanco.
El espino blanco tiene propiedades cardiotónicas, mejorando la irrigación del miocardio y los vasos coronarios. Esto quiere decir que ayuda al corazón a bombear la sangre y regula el ritmo cardiaco. De ahí que, su infusión está indicada en casos de insuficiencia cardiaca leve, perturbaciones del ritmo cardiaco, taquicardia paroxística, bradiarritmia y para prevenir anginas de pecho y restauración tras un infarto.
Es esencial tener en consideración la medicación empleada para tratar las nosologías cardiacas y circulatorias, puesto que puede existir alguna interacción con este producto. Por esta razón se recomienda preguntar con un profesional sanitario. Se aconseja emplear en nosologías leves.
Indicada para nosologías cardiacas leves: insuficiencia cardiaca leve, perturbaciones del ritmo cardiaco, taquicardia paroxística, bradiarritmia y para prevenir anginas de pecho y restauración tras un infarto.
Infusión, vía oral. Hervir doscientos ml de agua y agregar una cucharadita de planta, infundir quince minutos. Tomar dos-tres tazas al día.